La vida real
No sé si a ti alguna vez también te ha pasado montarte el cuento de la lechera en tu cabeza. Me encanta la parte del cuento de planificar el éxito y saber donde quieres llegar. El problema es recrear tu sueño y no poner desde el principio todas tus energías en que las cosas sucedan.
También es muy humano el hacernos trampas. Cuando no conseguimos nuestros objetivos la culpa nunca es nuestra: la situación económica, los clientes no aprecian todo lo que hacemos, no tuvimos el apoyo financiero, el equipo no acompañaba y las mil y una excusas que nos vienen a nuestra mente.
Qué pocas veces pensamos qué hubiese pasado si hubiese hecho las cosas de otra forma, si me hubiese anticipado a la crisis y hubiese lanzando productos y servicios adecuados, si hubiese ajustado la estrcutura, si hubiese planificado funcionar con menos financiación o financiación alternativa (ya hablamos en el Error #1: Avalar: si tú no crees en tu proyecto, el banco tampoco), que fuimos nosotros quien elegimos mal al equipo y cuando nos equivocamos lo dejamos pasar y no tomamos acción para corregir nuestros errores.
Estamos demasiado obsesionados con que algún día todo cambiará, y nuestra vida mejorará por arte de magia. La realidad es muy distinta. Todo lo que sucede, bueno y malo es gracia a ti. No dejes que la suerte resuelva tu vida.
Y esta situación también me pasó a mi. Mi gran sueño:
Montar una empresa desde cero y venderla
Tantos casos de éxito se leen en los periódicos de personas que han hecho muchísimo dinero vendiendo su empresa que al final pensé, ¿por qué yo no?
¿Por qué no montar una empresa para venderla?
En 2005 monté con otros socios una empresa para venderla. Al tema de socios dedicaré otro artículo. Ya he comentado en varias ocasiones que me fue muy bien y luego muy mal. Si todavía no lo has hecho te invito a leer Lecciones de una quiebra.
Los objetivos de vender una empresa
¿Cuál es el objetivo de vender tu empresa? Cada uno tendrá los suyos, pero el más importante es conseguir una libertad financiera que te permita disponer de tu tiempo de la forma que a ti mejor te parezca sin ningún tipo de limitación económica.
En mi caso, me apetecía tener libertad financiera para:
- Dedicarme a escribir sobre temas que había aprendido y formar a otras personas.
- Estar más tiempo con mis peques
- Tener el horario que a mí más me apeteciese.
- Tener mi futuro financiero asegurado
¿En qué se traduce en el día a día de la empresa?
- No tener unos salarios acordes con el mercado (me refiero como socio / trabajador) para tener mejores números.
- No repartir dividendos.
- Entrar en operaciones con clientes porque te da prestigio, pero perdiendo rentabilidad.
- Re-invertir el 100% de lo obtenido en la empresa sin nunca repartir nada. Personalmente recuerdo un año que tuvimos unas operaciones especiales con las que generamos 1 MM de euros y los dedicamos a comprar nave y maquinaria sin repartir nada. Y me confirma que cuando más dinero tienes (por financiación o por operaciones especiales) eres mucho menos exigente con los criterios de inversión. Si hay dinero, pues me preocupo menos. Y no somos conscientes que el dinero se acaba.
- Echar muchas, muchas horas sin plantearte si realmente esas horas están bien aprovechadas o se podrían utilizar de una forma más productiva.
- Pensar que todo irá bien. Si siempre te ha ido bien, piensas que va a ser así toda la vida. Y si en algún momento da la vuelta piensas que es una situación circunstancial.
¿Cuál es el error?
Las empresas no se montan para venderlas.
Las empresas se compran, no se venden
¿Y por qué se compran?
Porque generan ingresos de una forma estable. A pesar de lo que publican los periódicos de casos de éxito, la realidad es muy distinta. En muy pocas ocaciones se compran empresa para hacerlas aún más rentable. Son casos contadísimos. Tecnologías disruptivas y que se compran en su momento de nacimiento. Es una situación que está lejos del común de los mortales. No digo que a ti no te pueda pasar, pero las posibilidades son muy bajas.
No puedes pensar (como yo pensé) que por tus instalaciones productivas y tu base de clientes otra empresa más grande te va a comprar porque le encaja en su negocio. Sí que le puede encajar, pero como no genere mucho dinero sólo le interesa comprarte a precio de risa. Echa un vistazo al artículo ¿Cuánto vale mi empresa?.
Y si por algún motivo alguien se plantea comprarte, ¿por qué no aceptar? Si las condiciones económicas son buenas y tienes en mente otros proyectos es una buena oportunidad. No es la primera vez que se ofrecen buenas cifras por una empresa, y al año siguiente ya no vale nada.
¿Para qué montar entonces tu empresa?
Yo quebré con mi empresa y también quebré personalmente. Y me di cuenta después, después de darme el tortazo. Suele ser así, la rutina y la seguridad nos impide plantearnos temas más profundos.
Los temas que realmente importantes en la vida no tenían que esperar a vender la empresa, sino que se podían hacer ya. Y ahora, que llevo un tiempo por mi cuenta y solo, sin socios, intento no posponerlos a cuando todo me vaya de fábula. Mañana no sé lo que pasará (lo mismo estoy muerto), pero sé que el día de hoy es un día perdido.
En mi caso, si mis objetivos eran pasar más tiempo en familia, escribir y formar y tener libertad de horarios, nada me impide hacerlo hoy. A día de hoy no tengo la libertad financiera que desearía, pero trabajo para conseguirlo haciendo cosas distintas. No creo en la magia y sí en probar cosas distintas hasta conseguirlo.
Voy a añadir un matiz más. Por detrás de todas esas cosas está tu para qué. Para qué estás en la vida. Si montas una empresa el dinero es una consecuencia. Tiene que haber algo más grande detrás. En mi caso la empresa era de calefacción eléctrica. Y el objetivo que había detrás era ser los primeros en innovación a precios asequibles. Y a partir de ahí ganar dinero.
Ahora, en mi etapa en solitario mi objetivo es transformar a las personas. Mejorar su día a día. Por eso en todas mis publicaciones EnamoraATuCliente, GeneraMasDinero, FelizyRentable o LinkedinSencillo (incluido mi podcast) siempre tiene que haber algo que se pueda llevar a la práctica.
La mayoría de las veces, necesitamos experiencias vitales negativas para tomar las riendas de nuestra vida. Sin embargo, tiene mucho más mérito reaccionar antes de darte el tortazo.
Me gustaría que con este artículos te planteases:
- Para qué estoy teniendo mi empresa, cuál es el objetivo vital.
- Plantéate ganar dinero tú, sin depender de temas externos. Hazte rentable y si alguien quiere que te venga a comprar. Pero en ese camino que sea tu empresa con tu esfuerzo la que te de la libertad financiera. No dependas de nadie ni creas en la magia.
Y para esta parte de saber cuáles son tus objetivos vitales, te dejo aquí un enlace para que te descargues la guía Feliz y Rentable. No sólo para que tú sepas tus objetivos, sino para que tus equipos también puedan compartirlos.
Si quieres que de alguna conferencias formación sobe el tema, o crees que te puedo ayudar en algo, ponte en contacto conmigo haciendo clic aquí o mediante correo a david@informacionparalaaccion.com.
Y si quieres estar avisado de lo que vaya sacando referente a este tema, puedes suscribirte a mi lista de correo de LinkedIn sencillo y seleccionar la opción Aprendiendo de mis errores. Si quieres recibir información sobre otros temas relacionados con LinkedIn, sólo tienes que señalarlos.